El sueño de volver
La carta que el Pipita Higuaín escribió para expresar su amor por River. El delantero recordó su paso por el Más Grande, cómo vivió el peor momento de la historia del club y el sueño de un glorioso retorno.
Escribo estas líneas desde Madrid y a pocas horas de otro partido con el Real. Mi padre me avisó de la convocatoria para poder escribirle al hincha de River a través de la Revista 1986. No lo dudé ni un minuto. Hacía mucho tiempo que quería expresarles mis sentimientos a esos millones de fanáticos a lo largo de toda la Argentina y el mundo.
A la distancia tenemos claro que el momento de River no es el mejor. Las heridas del descenso tardarán en cicatrizar. Aquella jornada fue terrible. Confieso que mientras estaba mirando ese partido contra Belgrano no lo podía creer. No me alcanzaba la cabeza para poder pensar semejante desastre. No podía entender cómo el club más prestigioso del fútbol argentino se estaba yendo a la B. Pero eso ya pasó y ahora es tiempo de pensar que River sigue siendo un club con mucho prestigio.
Acá en Europa el mundo del fútbol tiene claro que fue lo que pasó. Sin embargo, nuestros colores siguen presentes como sinónimo de buen fútbol. Todos, cuando piensan en River, siguen pensando en un club que es embajador del buen juego. Son muchos los jugadores con prestigio que salieron de River y están dando vueltas por el fútbol mundial. Desde lo personal sólo tengo palabras de agradecimiento para nuestro River. El club me dio muchas cosas fundamentales para mi vida. Creo que no sólo es importante destacar lo futbolístico sino también, lo personal y lo social. Pasé muchas horas de mi vida dentro de River. Pienso en mis años en el Instituto donde me formé como estudiante, en tantas tardes de entrenamiento y en las prácticas de Primera que tanto me marcaron como jugador y me permitieron llegar a Europa bien preparado desde lo profesional. Por supuesto que destaco el apoyo de toda mi familia, sin ellos hubiera sido imposible llegar hasta donde hoy estoy.
Siempre que pienso en River lo hago con una sonrisa. Para mi fueron años muy felices donde entre tantas presiones también aprendimos a divertirnos mucho. La anécdota que más recuerdo fue el día que me pelaron por mi debut. Era mayo de 2005 y hacía un frío terrible, pero yo estaba feliz y pelado. Para mi esas imágenes que dan vueltas en mi cabeza fueron muy significativas ya que empezaba a cumplir un sueño muy importante que era jugar en la Primera de mi querido River.
Muchas veces me preguntan por River en Europa. Sinceramente me cuesta explicar tanta pasión. ¿Cómo se puede transmitir en palabras ese amor incondicional del hincha por estos colores? Creo que no hace falta detallarle a nadie lo que es y lo que significa ser de River. Es un club inmenso, es un país entero. Siempre el hincha, el fanático del millonario se portó muy bien conmigo. Desde el minuto cero la gente me mostró su afecto incondicional. Lamentablemente, no pude darles más alegrías porque me fui joven. Jugué sólo cuatro torneos, los dos de 2005 y los de 2006, y sumando algunos de copa, en total fueron 41 partidos.
Siempre pienso que me quedaron muchas cosas pendientes con la camiseta de River. Tal vez algún día pueda volver y ayudar a recuperar la ilusión y la identidad de nuestra historia futbolística. Quiero volver para salir campeón, ese sería un sueño muy grande. Soy joven y todavía tengo muchos años más en Europa. Pero sa deuda algún día la voy a pagar.
Mientras cierro estas lineas se me pasan por la cabeza más recuerdos imborrables. Como no mencionar los dos goles ante Boca. Son imágenes increíbles que guardo para siempre en mi memoria. La pelota tocando la red y ese estadio enloquecido festejando. Fue una fiesta como debería ser cada domingo.
Conseguí la edición N° 13 en —>> Tienda 1986.
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